Lamentable que las autoridades estatales no autoricen la apertura de salones de fiestas, cuándo se registran bailes sonideros y fiestas clandestinas en diversos puntos de la ciudad, afirmó Olga Méndez Juárez presidenta de la Cámara Nacional de la Industria Restaurantera y Alimentos Condimentados (CANIRAC).
Refirió que estas fiestas clandestinas que se realizan los fines de semana, sin ninguna medida sanitaria, están provocando un riesgo para la salud por el contagio del Covid-19.
Lo anterior luego de que el gobernador Miguel Barbosa Huerta, informó que no hay condiciones para la apertura de salones sociales.
Méndez Juárez, comentó que hace unas semanas se tenía la esperanza para la reapertura de estos espacios, sin embargo con el cambio de semáforo epidemiológico se cancelaron las pláticas.
Destacó que son miles de trabajadores eventuales que viven de este sector u que han estado 8 meses sin trabajar y es por ello que están muy afectados y han solicitado trabajar
Se destacó que esta industria genera más de 5 mil empleos formales y más de 25 mil mensuales temporales, y una derrama económica anual de más de 500 millones de pesos con la organización de miles de eventos.
De continuar el cierre de este tipo de empresas provocará un impacto muy negativo para este sector que por muchos años ha sido uno de los soportes de la economía del estado.
Los trabajadores de los salones sociales realizaron un programa para reabrir sus negocios con todas las medidas sanitarias, el cual se presentó ante la Secretaria de Economía, Protección Civil y DPRIS.