SENTIDO COMÚN
Jueves, 14 de marzo de 2024
Por Luis Gabriel Velázquez
Zoé Robledo nos vio la cara a todos. Vino a prometer a Puebla que se tendría un nuevo hospital del IMSS en Amozoc.
Las sospechas de que esto no iba a cumplirse comenzaron desde el mes de diciembre, cuando tenían que haber arrancado las obras de construcción.
En una enésima visita a Puebla, donde parecía más importante para el director general venir a comer mole, garantizó que esta obra estaría terminada en los tiempos que se habían pactado, ante la pregunta insistente de un reportero por el sobrecupo que se vive en el hospital de La Margarita.
Pero pronto los rumores se confirmaron, cuando el gobierno federal anunció en noviembre del año pasado que no había recursos para construir el hospital de Amozoc.
Entonces ya con la mentira en la cara, anunció hace tres semanas que la obra tendría “ya le tocaría” a la próxima administración.
Esta pésima noticia golpeó aún más a los derechohabientes que tienen hasta que pedir prestado para atenderse en la medicina privada, porque el seguro social no tiene medicamentos para el cáncer y tampoco tiene la capacidad de seguir subrogando estas patentes.
En el tema de aquellos poblanos que acuden a oncología, el caso es más dramático debido a que pasan hasta dos semanas para poder recoger su medicamento, cuando que todos en este país sabemos que por la importancia de la enfermedad, un día sin tratamiento, puede ser un día menos de vida.
La otra gran crisis es por el número de camas que son insuficientes y que obligan a derechohabientes a sentarse en su vehículo con el suero en la mano, porque no hay ni una camilla donde puedan recostarse.
Quizá esta incapacidad mostrada al frente del IMSS contraste con su espectacular currículum, pero no se vaya con la finta, la sensibilidad por el bienestar ajeno, no es tributo que se obtenga en la academia.