Ernesto Canto, marchista mexicano medallista de oro en los Juegos Olímpicos de Los Ángeles, miembro del Comité Ejecutivo del COM y un ícono de la marcha mundial, falleció ayer viernes.
El Comité Olímpico Mexicano aseguró que el medallista de oro en los 20 km de marcha de los Juegos Olímpicos de Los Ángeles 1984 pereció después de sufrir cáncer de páncreas.
Canto, quien cumplió 61 años el pasado 18 de octubre, comenzó a triunfar en el atletismo a finales de los 70, pero entró a la élite mundial en 1981, cuando le dieron el Premio Nacional de Deporte, luego de varias giras que había hecho en Europa, donde mostró superioridad.
El camino a Los Ángeles comenzó en 1982 con una presea dorada en los Juegos Centroamericanos y del Caribe, mismos que se celebraron en la Habana, Cuba.
Su carrera siguió en ascenso en 1983, año en el que consiguió el campeonato mundial tras parar el cronometro en 1:20:49 en la pista de Helsinki, Finlandia, además de que recibió el trofeo de la Hispanidad, logros que la Federación Internacional de Atletismo Amateur (IAAF) lo nombró como el “Mejor Andarín del Mundo”.
En 1984 llegó al clímax de su carrera, pues primero impuso marca mundial de la hora en el Grand Prix de Softland en Bergen, Noruega y posteriormente rompió récord en la prueba de 20 kilómetros con 1:18:38.
El momento esperado tuvo lugar en el Memorial Coliseum de Los Ángeles, donde cruzó la meta en 1:23:13 para colgarse la medalla olímpica de oro.
Además, Canto ganó en 1973 y 1976 el Campeonato Centroamericano y del Caribe Juvenil en la distancia de 10 km.
En su búsqueda por subirse al podio olímpico, en 1980 consiguió la mejor marca mundial del año en 20 km marcha con una marca de 1:19:01.
En 2017 fue nominado Mejor Atleta Mexicano de la Historia.