Jueves, 09 de febrero de 2023
La halterofilia es una disciplina que implica fuerza y desgaste físico en los atletas, como en el caso de Ana Gabriela López Ferrer, que a sus 28 años ya se ha sometido a dos operaciones en la rodilla derecha y una en el hombro derecho; a pesar de ello, tuvo una destacada actuación en Tokio 2020 y quiere hacer historia al convertirse en la primera mujer halterista mexicana en llegar a dos justas olímpicas.
La veracruzana platicó e hizo énfasis en las fortalezas y aprendizajes que le ha dejado su trayectoria de 16 años en la halterofilia.
“No me doy por vencida tan fácil. He salido de tres cirugías, no me voy a detener. Soy un atleta muy persistente, con mucha paciencia y muy resiliente. Sin paciencia es verdaderamente difícil, pero intento ser paciente y decir ‘Ana, esto es un proceso’. Le tienes que dar calma porque si no lo único que haces es retroceder”.
La atleta más carismática de México durante la inauguración de Tokio 2020 recordó aquel momento y señaló que lo único que quería es que sus amigos y familiares se dieran cuenta de que estaba logrando su sueño. Pasó de ver el desfile inaugural en la televisión a ser una de las privilegiadas en ver encenderse la Llama Olímpica en vivo.
“Me puse a llorar, es algo genial. Me motivó demasiado, estar detrás de mí bandera con los colores de mi país, es algo único”.
Para llegar a ese gran sueño, Ana Ferrer tuvo que sacrificar un sinfín de cosas a temprana edad como la convivencia con su familia y amistades en fiestas y reuniones, debido a las concentraciones en el CNAR con la selección mexicana.
“No nos damos cuenta de todo lo que sacrificamos porque yo era solo una niña y no podía hacer lo que hacía una niña de mi edad. Sacrifiqué todo eso y fue duro, pero en el momento no me di cuenta. Hasta mi fiesta de quince años, yo anhelaba mi fiesta de quince años, y estaba en Chile compitiendo en unos Panamericanos cumpliendo quince años. Son unas por otras, no me arrepiento”.
Ana Ferrer hizo un ejercicio en retrospectiva y le dijo a su yo del pasado que todo el sufrimiento, el desgaste y desesperación han rendido frutos.
“Volteo a ver a Ana de 12 años y le digo que tenga mucha paciencia. Es algo verdaderamente difícil pero se logra. Todo lo que pasa, el dolor, la desesperación, lo vas a lograr, verdaderamente lo vas a lograr y te abrazo mucho y te doy mucha fuerza”.
Ana Ferrer comenzará su etapa de clasificación rumbo a los Juegos Olímpicos París 2024 en un año donde tendrá campeonato mundial, Juegos Panamericanos, Juegos Centroamericanos, pero antes tendrá que superar la eliminatoria al interior de la selección mexicana para hacerse con una de las cuatro plazas.