Un equipo liderado por astrofísicos de México encontró alrededor de cuatro mil estrellas masivas tipo Wolf-Rayet (WR) en las icónicas galaxias Antennae, localizadas a unos 60 millones de años luz de distancia. Con este trabajo aumenta significativamente la cantidad de este tipo de estrellas extragalácticas detectadas en el Universo local, mismas que serían progenitoras de otros fenómenos astrofísicos interesantes como cierto tipo de supernovas y estallidos de rayos gamma.
Los resultados de esta investigación fueron aceptados para su publicación en la revista británica Monthly Notices of the Royal Astronomical Society (MNRAS). En el estudio se reportan el número, la clasificación, la distribución y los ambientes de las estrellas WR en Antennae.
El proyecto fue liderado por el Dr. Mauricio Gómez-González, graduado del Instituto Nacional de Astrofísica, Óptica y Electrónica (INAOE) y actualmente posdoctorado del Instituto de Radioastronomía y Astrofísica de la UNAM (IRyA-UNAM), y en él colaboran los doctores Divakara Mayya del INAOE; Jesús Toalá y Jane Arthur, del IRyA; Javier Zaragoza, del INAOE, y Martín Guerrero, del Instituto de Astrofísica de Andalucía (IAA) en España.
El estudio fue realizado utilizando observaciones de la base de datos pública del VLT (Very Large Telescope) del European Southern Observatory (ESO) en Chilen tomadas con el instrumento MUSE (Multi Unit Spectroscopic Explorer).
Las estrellas WR, que deben su nombre a los astrónomos franceses Charles Wolf y George Rayet que las descubrieron en 1867, representan la etapa final en la evolución de las estrellas masivas, con masas iniciales mayores que 25 veces la del Sol.
Las reacciones nucleares en estas estrellas son más eficientes que en estrellas de menor masa, explica el Dr. Mauricio Gómez-González. “Son estrellas muy jóvenes y la fase WR representa alrededor del diez por ciento del tiempo de su vida, de por sí muy corto en escalas de tiempo astronómico. De allí la rareza en encontrarlas. Esta fase está caracterizada por importantes pérdidas de masa mediante fuertes vientos, los cuales arrojan elementos importantes tales como oxígeno, nitrógeno y carbono, al medio interestelar circundante”.
El Dr. Gómez agrega: “He estudiado este tipo de estrellas desde mi doctorado en el INAOE. Busqué observaciones públicas del Gran Telescopio Canarias (GTC), donde tengo experiencia en el estudio de estas regiones, para enseñar en una clase a estudiantes del IRyA y para mi sorpresa, al analizar el espectro de una zona de las galaxias Antennae, encontré rasgos de estas estrellas. Fue una serendipia, una casualidad. Esto me llevó a realizar una búsqueda más exhaustiva usando datos públicos de MUSE de este par de galaxias”.