Por José Sosa.
El cierre a los visitantes del Panteón Municipal ha dejado pérdidas económicas a los vendedores de flores y a negocios de lápidas, quienes han visto una disminución en sus ventas de entre el 60 y 70 por ciento.
De acuerdo con Ignacio Hernández, encargado de un negocio de lápidas y monumentos, sus ventas han bajado hasta en un 70 por ciento debido a la contingencia sanitaria; sin embargo, aceptó que continúa realizando trabajos principalmente para personas que perdieron familiares por covid-19.
Hemos tenido varios casos de personas que perdieron familiares por covid-19, pero recuerdo un caso de unos hermanos que fallecieron los dos por está enfermedad, simplemente porque se estaban cuidando mutuamente, comentó.
En tanto, Elia Hernández, florista, dio a conocer que por el cierre del cementerio han bajado hasta en un 60 por ciento sus ventas, pues aunque los servicios de cremación e inhumación continúan, los familiares de los difuntos suelen comprar muy pocas flores por las restricciones de personas y el tiempo que tienen permitido para estar en el camposanto.
Dijo que tras veinte años de trabajar ininterrumpidamente en su negocio de flores, la contingencia sanitaria del COVID-19 ha dejado afectaciones económicas muy severas para ella y su familia.
Tengo 20 años trabajando en este negocio de flores, y la verdad nunca se había vivido esto que el Panteón Municipal estuviera cerrado, por el momento sólo se venden flores para fiestas, ya que ni funerales y entierros con muchas personas hay, expresó.
Cabe destacar que del 25 de marzo del 2020 al 3 de enero del 2021, en el Panteón Municipal, que permanece cerrado a los visitantes, se han dado 130 servicios Covid-19, de los cuales 100 han sido cremaciones y 30 inhumaciones.